domingo, marzo 08, 2015

8 de marzo

Dibujo: Elsy


Desde la mujer que soy: artista, militante, humanista, por ser una más, no quiero rosas ni felicitaciones en los 8 de marzo. Felicitenme por la  lenta gestación hacia la mujer sensible, amorosa, luchadora, solidaria; por la aventura de la cual he participado apasionadamente: la revolución social (aquella de la que hablaba Marx y Lenin). Por permanecer intacta ante las dudas, el encarcelamiento, por los fracasos, por el tedio, que me producen las conversaciones embriagadas de frívolos éxitos; por aquellos  días y noches  desolados, sombríos, que han generado injustificables demoras, en los olvidos. Soy  mujer atormentada, por las desigualdades sociales y la injusticia.


Ser mujer, no es, únicamente parir hijos para que los hombres se sientan más machos y menos envejecidos;  ese ejercicio, lo hacen muchas veces por desidia,  por imbéciles, por equivocación, por error. La maternidad no nos hacen más o mejores mujeres. 

Dentro del concepto burgués de vida, se incluye como idea: la extrema degradación de  la mujer en las manos de su maridos.Constituyendo la maternidad como un eje central, de dominación. Somos nosotras las únicas quienes debemos decidir sobre nuestro cuerpo. 


¡No más hipocresía a nombre del Día Internacional de la Mujer.


Contra la opresión: ¡ No más beneficios para los hombres !


Y… la lucha no es entre géneros; es que, si queremos una sociedad  justa, no podemos dejar que  nuestro espíritu se encoje, nuestra mente ensordezca, nuestro corazón se debilite y nuestra voluntad languidezca.


Desde mi condición de mujer, me sumo a las voces por la paz: no más hijas e hijos para la guerra…Más hijos e hijas solidarios, éticos, amorosos, con hermosos sueños y risas geniales.


Elsy